¿Somos un matrimonio de apariencias?

Un matrimonio es de apariencias cuando una pareja no está clara, definida, está enredada, y no está segura si se quieren o no, incluso muchas de ellas no saben ni lo que son, aún conviviendo por muchos años, no saben si reír o llorar al estar junto a esa otra persona.

Esta relación de apariencia trabada en discusiones y contrapuntos, ha hecho que pierdan el verdadero motivo por el cual se casaron. No es una relación que fluye naturalmente sin que todo lo que se diga o haga sea satanizado.

Son parejas que no pueden vivir juntos pero tampoco separados. Ni contigo ni sin ti.

Se podría confiar en ese tipo de amor ? No!

Diferencia entre la relación sana y la relación de apariencia

El verdadero amor que siente una pareja es definido, completo, constante, no duda de cuanto lo ama o la ama. Se esfuerza por sentirse comprometido, discute sus diferencias pero al final disfruta su relación.

Si han escuchado ustedes que ciertas personas piden a su pareja tiempo extra de exclusión para pensar si se sigue o no en la relación?.. El que duda no ama. Debería coger sus maletas e irse y ya. No le hipoteque el tiempo a la otra persona haciéndole sentir esperanzas de mejores días que podrían ser o no ser. No es así como se resuelve la permanencia en una relación. Se excluya o se quede, así no resuelve nada.

Por qué entonces permanece en un lugar que ya no quiere estar, que ya no quiere compartir más con esa persona? Por apariencias? !Qué grave error!.

Forma equilibrada de ver el matrimonio

Un matrimonio es una institución sagrada !es verdad!. Como también es verdad que con el tiempo todo matrimonio sufre embates de diferencias que no deberían ser irreconciliables, deberían ser revisadas a tiempo para corregir cualquier infortunio y podrían salvar el matrimonio.

Un matrimonio se deteriora al grado de la ruptura cuando la pareja deja por mucho tiempo en manos del otro la responsabilidad de irse, separarse o divorciarse, empañada de culpa por supuesto, esto además sirve para mantenerlo castigado, que los hijos y familiares lo rechacen por haber sido un irresponsable…. el otro o la otra parte, la inocente, cree estar libre de culpa, se lava las manos y entra en modo de espera.

Alguien podría decir: bueno hay que dejarle la posibilidad al otro, que sea él el que tome la decisión. Por qué yo? Mañana más tarde entonces yo sería la culpable o el culpable ante los demás que rompí con el matrimonio. Me mataría quedarme con esa culpa.

Es por esto que en casa se convierten en dos extraños, sólo comunican sus necesidades básicas o las mandan a decir con los niños o con terceros llegando a convertirse en un Matrimonio de apariencias.

¿Cómo es un Matrimonio de apariencias?

De esta manera, siguen los días, los meses y los años. Se acostumbran tanto al matrimonio de apariencias que cuando salen al mundo exterior, tienen la necesidad de aparentar lo que no son en realidad. Salen cogiditos de la mano y hasta abrazaditos y se dan piquitos frente a todos para confirmar ante los demás cuánto se aman y cuán estable es esa relación.

Cuando ustedes vean a una pareja así que mientras más demostraciones de amor se hagan en público o frente a los demás, más duden de ese amor. Ese amor no es real, es una relación de apariencia.

Alguna vez ustedes tienen que haber dicho: “ ¡pero si se los veía tan bien, no puedo creer que se hayan divorciado¡” ajá ¿verdad que no me equivoco?

¿Por qué tiene que importarme más un matrimonio de apariencias que mi propio bienestar?

Ojo, con esto no quiero dejar el mensaje que se vuelvan egoístas en el mal sentido de la palabra, que se divorcien a la vuelta de la esquina: No .

Dije que el matrimonio es sagrado y se respeta. Sin embargo, debo tener la obligación moral y de pareja de revisar sus fundamentos, para ver si no se han cambiado sus orígenes o se hayan tergiversado los verdaderos motivos por el cual decidí comprometerme en matrimonio.

Reflexione en lo siguiente para que permanezca con el motivo correcto en la relación:

Si me amas, de la cintura para abajo.

Si me extrañas, cuando me necesitas

Si dudas que me amas, pero me utilizas

Si me ofreces, pero no me cumples

Si dudas de mi amor y me proyectas tus miedos

Si te vas hoy, pero te tengo de regreso mañana

Te vuelves a ir mañana y me prometes hoy

Si me manipulas emocionalmente y te sigo creyendo

Si todo esto me pasa; entonces, tú no me convienes.

¿Por qué quedarme contigo en una relación de apariencia ?

Si esto sucede en una relación de pareja, el que sí está comprometido seriamente estaría en una relación de desventaja frente al indeciso. Estaría sola o solo casado y llevando a cuestas una relación de pareja basado en la confusión y el desamor.

La verdadera estructura esencial en el matrimonio no es precisamente el amor romántico por que podría acabarse o desgastarse con el tiempo o por alguna causa ajena y eso no es motivo para irreconciliarse.

La clave para la permanencia en el matrimonio es el sentir ese amor ágape por la otra persona. Esto implica que cuando tú me necesites de verdad sea en todo tiempo, que me ames de cuerpo entero, que me valores y aprecies mi contribución, que confíes en mí y no me celes intensamente, que si decides quedarte a mi lado es porque los dos hemos tomado esa firme decisión. Porque…

• Con el amor no se juega ni se permite que el otro juegue.
• Con el amor no hay mentiras sólo verdades aunque duelan
• Con el amor no hay solo el parecer, tiene que haber el ser
• Con el amor no hay perfección, si errores que no se vuelven a repetir

Con el verdadero amor hay reconciliación de verdad, tanto si me acuesto como si me levanto, tanto si estoy dentro como si estoy fuera, si es de día o es de noche. El verdadero amor siempre será el mismo.